Tanto la limpieza doméstica como la industrial tienen puntos en donde se asemejan y otros en los que son distintos. Lo principal es que es deber hacer ambas de todas formas, ya que la limpieza doméstica se ocupa de mantener la calidad de los ambientes individuales y familiares; y la industrial se enfoca en las áreas de trabajo en donde encontramos grupos o colectivos de personas. Descubre en este blog algunos datos de ambos tipos de limpieza y desinfección.
Limpieza doméstica: métodos tradicionales y mecanizados
La limpieza del hogar debe realizarse con frecuencia para mantener el orden y evitar la acumulación de residuos tales como el polvo en las superficies. Con el fin de realizar una limpieza de este tipo, se utilizan métodos manuales con utensilios tales como:
- Escoba o escobillón.
- Pala.
- Paños o trapos.
- Esponjas.
- Mopas/Traperos.
- Basureros.
- Bolsas de basura.
Estos insumos nos ayudarán a la hora de retirar residuos tanto en seco como en húmedo y sin necesidad de emplear técnicas avanzadas de limpieza. Existe una gran diversidad de implementos que se adaptan a los requerimientos y los métodos a utilizar. Un ejemplo: Existen escobillones suaves, ásperos, para interiores o exteriores. También hay paños que cumplen distintas funciones para diversas superficies.
En la actualidad, todo mercado de artículos básicos ofrece estos utensilios y sus variedades de modo que su accesibilidad es universal.
Productos de limpieza
Los productos químicos que se utilizan en la limpieza doméstica tienen como fin remover los desechos más complejos (por ejemplo: residuos incrustados) y también desinfectar. Algunos detalles a considerar sobre estos agentes son:
- Los productos deben estar registrados bajo la legislación pertinente de cada país.
- Su aplicación depende de qué tipo de superficie va a tratar, ya que algunos productos son corrosivos y pueden dañar a largo plazo el material estas.
- Comprobar las interacciones químicas del producto con otros componentes y los rangos efectivos de pH y temperatura previo a su aplicación.
- Leer y seguir las instrucciones de uso.
- Tomar en cuenta:
- Tiempo de contacto recomendado.
- Forma de almacenamiento.
- Vida útil y estabilidad del producto.
- Trazabilidad del componente o materia.
Entre los productos de limpieza más utilizados en el hogar, encontramos:
- Detergentes.
- Desinfectantes.
- Limpiavidrios o limpiacristales.
- Jabón de higiene personal.
- Jabón de limpieza de objetos.
- Desengrasantes.
- Lavalozas o lavavajillas.
- Limpiamuebles o lustramuebles.
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Asimismo, es posible utilizar estos químicos en conjunto a equipos o máquinas de limpieza y/o desinfección, lo cual mecaniza el proceso. Esto se hace, en su mayoría, cuando se contrata un servicio de limpieza doméstica para agilizar la tarea de forma externa. Estos servicios también pueden combinar la limpieza mecanizada con métodos manuales, lo que dependerá de la realidad de los clientes.
Limpieza industrial: métodos avanzados para toda industria
En la industria, independiente de la que se trate, los procesos de limpieza y desinfección tienen que ser realizados sí o sí por profesionales. Las empresas pueden contratar personal específico para las tareas de limpieza o bien externalizar el servicio de limpieza a una empresa especializada.
Si quieres saber más sobre cómo se externaliza el servicio de limpieza industrial, esta entrada te puede interesar.
En este tipo de ambientes, en donde predominan plantas de grandes tamaños o empresas con áreas diversas y complejas de alcanzar, incluyendo instalaciones en alturas, es preferible optar por procesos de limpieza mecanizada. El uso de maquinaria y equipos diseñados para la limpieza industrial agiliza en un gran porcentaje las tareas y aseguran la efectividad total.
En el caso de la desinfección, contar con equipos de alta tecnología que puedan aplicar productos desinfectantes en toda el área sin dañar equipos ni superficies es fundamental.
La limpieza en la industria supera los requerimientos de una limpieza doméstica ya que cuenta con más detalles, entre ellos:
- Áreas difíciles (en plantas: tuberías, conexiones, agujeros de ventilación, maquinaria de producción no desmontable, entre otros).
- Tamaño del lugar (las oficinas cuentan con grandes áreas de trabajo, casino, baños, despachos, salas de reuniones; en el caso de las plantas de trabajo, estas tienen bodegas de menor a mayor tamaño, salas de producción, zonas exteriores, baños, camarines, entre otros).
Y no solo eso, también debemos recordar que en la industria alimentaria hay una gran cantidad de peligros y riesgos que es deber controlar porque existe una legislación que reglamenta el funcionamiento de las empresas dentro del rubro. Esto también puede aplicarse a la industria agropecuaria.
Por otro lado, la industria hospitalaria está regulada por estrictas normas que requieren de una limpieza superior, ¿Te imaginas que los hospitales y clínicas no tuvieran protocolos de limpieza y desinfección? ¡Habría más enfermedades de las que se curan!
Documentación: una parte importante de la limpieza industrial
Una particularidad de la limpieza industrial es que esta, además de tener una frecuencia programada, se debe documentar de forma correcta. Para ello podemos identificar algunas partes importantes del proceso de documentación, tales como:
- Calendarizar la limpieza con un listado de las áreas de trabajo.
- Establecer procedimientos e instrucciones de:
- Limpieza por tipo de superficie.
- Métodos de limpieza.
- Manejo de químicos.
- Tener un protocolo de manejo de utensilios o ropa contaminada (esto, sobre todo, está muy vigente en la actualidad con la pandemia mundial por el virus SARS-CoV-2).
- Contar con registros de:
- Dosificaciones.
- Monitoreos.
Además de documentar, al finalizar cada proceso de limpieza y desinfección, es necesario liberar la limpieza, ¿Qué quiere decir esto? Que es deber verificar y confirmar que se ha limpiado y desinfectado por completo de forma correcta la zona o zonas establecidas.
Si existe algún error, este es el momento en el que debe rectificarse y volver a verificar hasta que sea posible liberar por completo la limpieza.
Dato: Quien realiza la liberación de la limpieza debe ser un tercero, es decir, un profesional distinto a quienes ejecutaron los procedimientos.
Como puedes ver, la limpieza doméstica y la limpieza industrial no pueden ser puestas a competir entre sí porque, en realidad, ambas tienen procedimientos correctos de aplicación y dependen por completo del contexto. En el hogar no podemos incluir el uso de maquinaria para limpieza industrial, así como tampoco es adecuado o productivo limpiar una gran empresa con paños y escobas.
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⠀⠀⠀Redacción e investigación: Michelle Boisier
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